¿Por qué mi hijo no quiere masticar? | Odontopediatría
A los 6 meses, el bebe ya cuenta con madurez fisiológica y neurológica para masticar. Su aparato digestivo es mas maduro y tolera casi todos los grupos de alimentos. Ya puede masticar amasando con la lengua y la encía. Inicia a dejar el reflejo de protrusión lingual y controla mas su lengua. Existe evidencia científica de que si se retarda la experiencia de nuevas texturas, sabores, temperaturas, consistencias y formatos ofreciendolos despues de los 12 meses, en lugar de a los 6, se tendrá una peor aceptación y dificultad masticatoria. Si los alimentos solidos o pastosos no se introducen antes de los 10 meses de edad, puede aumentar el riesgo de presentarse dificultad masticatoria en el futuro. Siempre recordar, que se debe respetarse el ritmo individual del paciente de acuerdo a su desarrollo neuropsicomotor, el temperamento del bebe y del cuidador. Pero como el riesgo de problemas masticatorios aumenta con lo mencionado anteriormente, se recomienda una evaluación para saber si se toma el riesgo de esperar a la introducción de la incorporación de papillas a la dieta o se inicia.
La masticación debe aprenderse, no se nace sabiendo masticar, es una actividad de los sentidos, de los músculos y se adquiere. Cuando el niño se lleva su mano a la boca o algunos juguetes, va preparando la boca a la aceptación de los alimentos y contribuye a aprender a masticar.
A los 6 meses, solo el niño tiene movimientos que abren y cierran la boca, la lengua amasa y lleva la comida a la faringe. A los 8 meses aproximadamente, inician los movimientos laterales al masticar, llevando de un lado a otro el alimento. A esta edad ya puede comer pedazos solidos de verduras cocidas y frutas blandas masticándolos de un lado al otro, desgarrándolos. A los dos años, el niño ya tiene una excelente eficacia masticatoria. Al inicio la lengua aplasta el alimento contra el paladar, cuando no hay dientes.
La masticación esta bien desarrollada entre los 18 a 24 meses de edad y el bebe ya puede comer alimentos mas solidos crudos, fibrosos y de textura mas consistente, sus movimientos son bilaterales, alternados y rotatorios, sus labios permanecen cerrados en el proceso de masticar.
El bebe se debe ir entrenando desde los 4 meses, poco a poco con la lactancia materna, mordederas y hasta sus propias manos, para crear un registro de memoria previo a la fase de alimentación complementaria. Cuando el bebe no tuvo esta vivencia previa, puede presentar resistencia para aceptar los alimentos, rechaza los alimentos o tiene dificultad para masticar. Estos bebes prefieren alimentos pastosos o líquidos y evitan alimentos fibrosos como la cascara de la manzana, los gajos de la naranja, etc.
Los registros de memoria previas relacionados con los sabores se realizaron cuando la madre embarazada y durante la
lactancia se alimentaba sanamente, sin chatarra, el bebe estuvo en contacto con dichos sabores, los reconoce y los acepta mas fácilmente.